Un pescador paseaba con su hijo cuando vieron algo increíble. ¿Qué ves? -le preguntó el niño a su padre. -Una roca rara.
El niño miró a su padre extrañado y preguntó:
-¿En serio?
-Si, ¿Qué ves tú?
-Un elefante bebiendo agua.
-Tienes mucha imaginación -le dijo su padre sonriendo.
-Es verdad, la que te falta a ti.
#microrelatos
Marian Rivas
Que hermosa la inocencia e imaginación de un niño. Ellos pueden ver lo que muchas veces es invisible para los adultos, la belleza y la felicidad en las cosas sencillas. ¡Genial relato! ¡Saludos!
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